Una universidad tuvo un noble gesto al adoptar a tres perritos callejeros que fueron rescatados tras ser maltratados por sus dueños en México.
Así lo reveló la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo al compartir algunas imágenes de los perritos que ahora se convertirán en los fieles vigilantes de las instalaciones.
Los animalitos fueron nombrados como Guinea, Uva y Ónix; pero al confirmarse su adopción todos los trabajadores y estudiantes los acogieron con mucho amor.
“Los perritos necesitan un hogar, y si aquí en la universidad se puede proporcionar, pues me parece perfecto”, indicó una estudiante al medio Fuerza Informativa Azteca.
Los rescatistas de los perritos también se mostraron agradecidos con este noble gesto del centro universitario. Además, aprovecharon la oportunidad para destacar la importancia no solo de la adopción; sino también de que estas mascotas encuentren un hogar que realmente les dé amor y los cuidados necesarios.
Un triste pasado
Aunque hoy viven rodeados de personas que los aman, Guinea, Uva y Ónix tuvieron un pasado muy triste. Los tres perritos fueron víctimas de muchos maltratos antes de que la universidad los adoptara.
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Los animalitos tenían un severo cuadro de desnutrición y se logró comprobar que sus antiguos dueños los maltrataban.
Pero todo esto quedó en el pasado cuando los rescataron y enviaron a la organización GHAPAD, cuyas siglas significan Generando Hogares de Amor Para Animales Desprotegidos.
La condición de vida de los tres perritos fue muy notoria desde el momento de su rescate. Muy pronto retomaron un peso ideal y dejaron atrás el temor del maltrato.
“¡Bienvenidos a los nuevos integrantes! Nosotros también cuidaremos de estos caninos”, escribió la universidad mexicana en su cuenta de Facebook al compartir fotos de los perritos callejeros.
Además, en el post contaron las historias de las mascotas con el objetivo de concienciar a los estudiantes y demás miembros de la institución para fomentar la adopción y tenencia responsable de animales.
“Una de las perritas se estaba muriendo de hambre en una azotea, a otro perrito lo golpeaban; las condiciones en las que venían los perritos eran deplorables”, contó uno de los estudiantes.
Los perritos no solo encontraron un hogar para siempre; sino que ahora estarán ocupados en las labores de vigilancia dentro de la universidad.
Las directivas determinaron que estas mascotas tendrán la responsabilidad de cuidar la institución y detectar el posible ingreso de sustancias prohibidas por parte de algunos estudiantes.
“¡La mejor contratación!”, “Excelente, ejemplo a seguir”, “Una gran noticia nos dan a las personas que amamos a los perritos” y “Gracias por darles una nueva oportunidad de vida”, se lee entre los comentarios de los usuarios en las redes sociales.
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